Hay un momento, casi al comienzo, en Ready Player One, donde cientos de autos, incluidos el DeLorean, la mítica van de Brigada- A y hasta el Plymouth Fury de Christine (conducido creemos por Lara Croft) se encuentran en una carrera por Nueva York, pero cuando se cruzan con uno tiranosaurio rex de Jurassic Park y luego aparece King Kong, listo, es cuando uno dice, no hay como perder.

Es el año 2045, las personas pueden escapar de su dura realidad en el OASIS, un mundo virtual donde se puede ir a cualquier parte, hacer cualquier cosa y hasta ser cualquier persona, los únicos límites son su propia imaginación. El creador de OASIS James Halliday (Mark Rylance) dejará su inmensa fortuna y el control del OASIS al ganador de un concurso diseñado para encontrar un digno heredero y de ahí en más lo inimaginable. El OASIS que Spielberg crea es una locura visual, obviamente generado por computadora, como corresponde al hecho de que es un videojuego ficticio, pero lo suficientemente realista como para no sentir que estás mirando un videojuego bien hecho.

Una vez más -esta fábrica de blockbusters que es Steven Spielberg- lo volvió a hacer, es para conseguirse el pop más grande y sentarse (en lo posible en el cine, yo creo que sí, hay que ir al cine a verla) y perderse muy lejos de la realidad por un par de horas.

Además, hoy en Cinexperiencia, nos metimos de nuevo con Netflix, hablamos de cine para cine o cine para tele y hasta como la pasó Martín Coitinho @Nov_10 en su periplo por un Brasil colapsado de “chicos”. De todo, en este episodio, para grandes y chicos.

Ready Player One:

  • Dirección: Steven Spielberg
  • Basada en la novela de Ernest Cline (Ready Player One)