Nuevo editorial de la Secretaría de Prensa y Propaganda de AEBU.

Con ese ingenioso título el semanario Marcha daba cuenta de los sucesos de aquel 27 de junio de 1973, para así eludir la prohibición que los dictadores imponían. Era el inicio de una larga noche cuando el presidente Juan María Bordaberry, apoyado en las Fuerzas Armadas, decretaba la disolución del Parlamento y la instalación de un Consejo de Estado.

Los sectores más reaccionarios del Ejército imponían su hegemonía luego de haber desplazado a los militares comprometidos con la defensa de la Constitución. Paralelamente, los partidos tradicionales se dividían entre los defensores de las libertades y las instituciones y quienes respaldaban el golpe de Estado.

En el Senado de la República esa noche resonaron desafiantes y comprometidas las voces de Wilson Ferreira, Amílcar Vasconcellos y Héctor Rodríguez, entre otros, para declararle batalla decidida y constante a la dictadura.