Este lunes, estudiantes ocuparon el Instituto de Profesores Artigas (IPA), Magisterio, Educación Social y el CERP del sur, CECA. Hoy se sumaron otros tres centros ocupados por lo que suman siete. Por su parte, el Sindicato de Docentes de Formación en Educación (SIDFE) está en pre conflicto y se espera que defina medidas este fin de semana.

Las principales reivindicaciones comunes de los estudiantes de formación en educación tienen que ver con la falta de presupuesto, el rechazo al proceso de reforma planteada por las autoridades, que busca «en menos de tres meses» resolver «sin los actores involucrados» y la persecución (y el presupuesto destinado a esto último) de las actividades sindicales así como el blanqueo de muralismo en los centros educativos.

En Camacuá Diario hablamos con Maxi Santos, del Centro de Estudiantes del IPA (CEIPA); Camilo Rodríguez, del Centro de Estudiantes del CERP del sur (CECA); Yurema Bleda y Natalia Boschi, del Centro de Estudiantes del IFD de la Costa  (CEIFD); con Ramiro de la Asociación de Estudiantes de Educación Social (AEES) y con Liber Romero, presidente del Sindicato de Docentes de Formación en Educación (SIDFE-CSEU).

El IPA fue ocupado ayer lunes por los estudiantes, nucleados en el Centro de Estudiantes del IPA (CEIPA). Maxi Santos, destacó el aspecto presupuestal que tiene este conflicto y dijo que es “insuficiente” lo destinado a formación docente en la Rendición de Cuentas, “es insuficiente además considerar la reforma, la transformación curricular como central, entonces lo únicos recursos que se le asignan al CFE de manera genuina son alrededor de 60 millones” que los estudiantes entiendo en que “tiene que estar destinado a becas”. Santos agregó que se está reclamando la renuncia de Víctor Pizzichillo, presidente del Consejo de Formación en Educación (CFE), y que el proceso de reforma “que se está empujando para que se realice en menos de tres meses”, cosa que se entiende “inviable para un proceso de transformación serio”. Santos agregó que se busca que “se consideren otros tiempos, comenzando desde el principio, con estudiantes y docentes en una comisión y no con un documento plagiado como el que está ahora”.

«se está empujando para que se realice en menos de tres meses”, cosa que se entiende “inviable para un proceso de transformación serio”. Santos agregó que se busca que “se consideren otros tiempos, comenzando desde el principio, con estudiantes y docentes en una comisión y no con un documento plagiado como el que está ahora”.

El Centro Regional de Profesores (CERP) del Sur, ubicado en Atlántida, Canelones, también fue ocupado por estudiantes. Camilo Rodríguez, del centro de estudiantes, explicó que tres razones fundamentales llevaron a esta situación de conflicto en el lugar y tomar la resolución de ocupar, ante la falta de respuesta de las autoridades de la educación. Por un lado adhieren al reclamo de “mayor participación” y “participación real” en el proceso de reforma educativa. Rodríguez dijo que “hasta ahora tanto por el título de carácter universitario como por esta reforma en cuestión no se han tenido en cuenta los aportes de los colectivos docentes y estudiantes”. Por otro lado, explicó que específicamente en este CERP  existe “un problema de becas”, y se calcula “que también existe en otros lugares”, debido al crecimiento de la matrícula en formación docente “sin aumento de presupuesto para becas, lo que genera varios problemas”. Además en este centro educativo “no se está pudiendo cumplir con la beca de transporte”. Si bien el centro cuenta con dos ómnibus, estos “son muy antiguos” y “generalmente están rotos”. Los ómnibus realizan dos recorridos, “por la Costa y por el Santoral (…) toda esa gente depende de estos ómnibus, que se les otorgaron a través de la beca para poder venir a estudiar”. En tercer lugar, los estudiantes están preocupados por el clima de “censura” que se está viviendo en los centros educativos, “constantemente se están tapando murales o expresiones que se hacen para comunicarse con la gente, pero en todos los centros estamos con problemas edilicios” por lo que “se entiende como una falta de respeto que rápidamente haya movilización para tapar y repintar las fachadas y que no se destinen fondos en lo que realmente se necesita (…), el presupuesto está mal derivado”.

“constantemente se están tapando murales o expresiones que se hacen para comunicarse con la gente, pero en todos los centros estamos con problemas edilicios” por lo que “se entiende como una falta de respeto que rápidamente haya movilización para tapar y repintar las fachadas y que no se destinen fondos en lo que realmente se necesita (…), el presupuesto está mal derivado”

El edificio de la carrera de Educación Social, que se dicta en Montevideo, fue ocupado por la Asociación de Estudiantes de Educación Social (AEES), que emitió un comunicado con varias reivindicaciones, entre las que Ramiro, de AEES, destacó dos. Por un lado se denuncia “un proceso de desmantelamiento” de esta carrera, donde se “agudiza la precarización de la formación y del trabajo docente”. Ramiro explicó que esta situación se ve al momento de realizar la monografía final se pasó de una monografía “personalizada, un docente para cada estudiante» a «formar grupos de veinte estudiantes para un docente”. Esto produce “una pérdida de especificidad de las temáticas abordadas”, se perjudica el “acompañamiento”, resulta en una “sobrecarga de la labor de los docentes”, un desestímulo en la formación de “áreas específicas y se reduce el proceso de investigación y producción personal”. Por otro lado, Ramiro destaca la oposición a la reforma curricular donde “el CFD realizó un borrador de propuesta de malla curricular que será aplicada a partir de 2023 que, entre varias cosas, reduce horas de materias optativas” y “ elimina prácticas pre profesionales”.

Al momento de realizar la monografía final se pasó de una monografía “personalizada, un docente para cada estudiante» a «formar grupos de veinte estudiantes para un docente”. Esto produce “una pérdida de especificidad de las temáticas abordadas”, se perjudica el “acompañamiento”, resulta en una “sobrecarga de la labor de los docentes”, un desestímulo en la formación de “áreas específicas y se reduce el proceso de investigación y producción personal”

En el caso del Instituto de Formación Docente (IFD) de Ciudad de la Costa, ubicado en Solymar. Natalia Boschi, del centro de estudiantes de este instituto, explicó que en el lugar se dictan “tres carreras, maestro en primera infancia, magisterio y profesorado semipresencial”Yurema Bleda, del centro de estudiantes, nos contó que el 8 de agosto en asamblea se resolvió realizar un “paro activo” para conocer cuál era la situación de los estudiantes en esa zona. Este lunes, en asamblea extraordinaria, en el marco de las ocupaciones que comenzaron ese día, “se resolvió una ocupación para hoy, de 24 horas, con movilización y corte de calle” en Ruta Interbalnearia y Avenida Uruguay, “con entrega de volantes informativos” sobre la situación del IFD de la Costa. Las reivindicaciones de los estudiantes de este centro tienen que ver con “la imposición de la reforma de la malla curricular en Formación en Educación desde el Ministerio de Educación y Cultura”, explicó Boschi. Además de las discrepancias sobre aspectos del contenido propuesto en la reforma del CFE, Boschi hizo hincapié en la forma en la que fue planteada: “la resolución salió el 6 de julio, nos bajan el documento, ponen tres jornadas para trabajar, tanto docentes como estudiantes, e incumpliendo lo que establece la Ley de Educación, que cualquier cambio en la malla curricular debe pasar primero por una ATD [Asamblea Técnico Docente], más allá de que no sea viculante, se contraron ‘a dedo’ unos personajes llamados ‘dinamizadores’, para los que se destina en el presupuesto un dinero bastante importante y se viola la autonomía de la ANEP”; debido a que es el Ministerio de Educación y Cultura que resuelve estos cambios. “No nos alcanza un cartón que diga que vamos a ser ‘Licenciados en pedagogía de…’, queremos formación universitaria, queremos la Universidad de la Educación autónoma y cogobernada, queremos investigación, queremos extensión (…) Pretenden imponer una reforma sin fondos y sin participación real de quienes somos los actores reales de la educación, que somos los estudiantes, los docentes y los egresados”

“No nos alcanza un cartón que diga que vamos a ser ‘Licenciados en pedagogía de…’, queremos formación universitaria, queremos la Universidad de la Educación autónoma y cogobernada, queremos investigación, queremos extensión (…) Pretenden imponer una reforma sin fondos y sin participación real de quienes somos los actores reales de la educación, que somos los estudiantes, los docentes y los egresados”

En la noche de este lunes, conversamos con Liber Romero, presidente del SIDFE, que se encontraba en las afueras del IPA. Este sindicato se encuentra en un proceso de diálogo interno y se prevé que sesione este sábado la Mesa Representativa Nacional del SIDFE, donde los docentes de formación en educación evaluarán medidas a tomar, “que van desde el paro de 24 horas hasta la ocupación escalonada de centros, con ocupación del propio Consejo de Formación en Educación”, según explicó Romero. 

En cuanto a la modificación de la malla curricular en cuestión, eje central junto al presupuesto de estos reclamos, Romero dijo que “acá hay una reforma” que se “quiere imponer y resolver en pocos meses” y que “todos los involucrados han pedido tiempo para discutirla. No es que nos opongamos a una reforma sino que en todo caso una reforma de programas, de currículas, implica un tiempo que no son dos meses y medio”. En segundo lugar Romero explicó que la reforma “introduce cuatro áreas de conocimiento, la que tiene que ver con las materias específicas, las de formación pedagógica del núcleo de formación común, las que tienen que ver con la didáctica; e incluyen un cuarto eje que son los ‘nuevos lenguajes’ que le quita horas en concreto a las otras áreas del conocimiento que son específicas para la formación de un docente”. Sobre este último capítulo introducido en la reforma, Romero dijo que “no saben lo que contiene” y que “de los 32 centros que existen en todo el país, en 20 los docentes dijeron que no querían un reforma de este tipo”. Con respecto a los doce centros restantes, Romero dijo que gran parte de esos docentes “tampoco quieren esta reforma”.

Con respecto a las novedades en la reforma, “no se sabe lo que contiene” y que “de los 32 centros que existen en todo el país, en 20 los docentes dijeron que no querían un reforma de este tipo”

Al cierre de esta nota no había sido abierto un ámbito de diálogo con las autoridades de la Educación Pública ni habían sido notificados de posibles desalojos.