En la ciudad brasileña de San Pablo, se realizan por estos días una serie de jornadas de intercambio, organizadas por UNI, con el fin de reunir a sindicatos de la región y discutir «sobre el proceso de cambio tecnológico y digitalización, y cómo eso afecta al funcionamiento del sistema financiero, a los puestos de trabajo y a las organizaciones sindicales».

Así lo explicó el consejero central de AEBU, Pablo Andrade, quien encabeza la delegación del sindicato. «El objetivo del intercambio es actualizar la información para poder entender cuáles son los principales efectos de estos cambios», aseguró en diálogo con Camacuá Diario.

Este miércoles «estuvieron planteados dos fenómenos que son sumamente importantes» desarrolló Andrade. Uno de ellos fue «el avance de la banca digital, que permite un nuevo desarrollo del sistema financiero».

Por ejemplo, en Brasil, este avance «está implicando un cambio en la regulación de los puestos de trabajo en el sistema, y al mismo tiempo un modelo de flexibilidad laboral mucho más profundo», con lo cual se está caminando 

El segundo eje tratado fue «la utilización de algoritmos en la gestión, contratación, evaluación y definición de los procesos de trabajos en el sector financiero».

«Estos algoritmos son herramientas digitales que permiten a las empresas acceder a un volumen de información muy grande para la selección de trabajadores, la gestión de recursos humanos y establecer metas y objetivos de negocios. Eso conlleva cambios en la relación laboral, en la gestión de la empresa y, al mismo tiempo, en la salud laboral», explicó Andrade.

En la jornada del jueves se proseguirá el debate, «que culminará con una resolución que UNI presentará a su Congreso Mundial en el mes de diciembre», añadió el consejero central de AEBU.

Un tema que no se pasará por alto es el de los efectos que producen los cambios en los clientes y usuarios del sistema, fundamentalmente «en el manejo de la información personal y las violaciones a la ciberseguridad», algo sobre lo que AEBU ha estado especialmente alerta tras el caso del Banco Santander.

 

Foto: Ricardo Antúnez / adhocFOTOS