Joaquín Santa Cruz

por Camacuá y Reconquista

No escapa al conocimiento público la delicada situación de personal que atraviesan muchas sucursales del Banco República, pero especialmente la de San José, cuya dotación abastece también a las sucursales de Rodríguez, Rafael Perazza y Ecilda Paullier, vivió una etapa especialmente crítica.

Según narró el presidente de la Comisión Representativa del BROU, Joaquín Santa Cruz, la alarma se disparó en el mes de agosto, cuando un grupo de trabajadores contactó al sindicato para hacer saber que la situación «estaba llegando a un límite» y se requerían acciones urgentes.

«A partir de ahí accionamos enseguida, los estuvimos visitando, el Consejo del Sector Financiero Oficial tomó el tema e inició gestiones con el banco, logrando que algunos compañeros pasen a trabajar a San José en régimen de comisión», detalló Santa Cruz, en diálogo con Camacuá y Reconquista.

Además, agregó el dirigente, el próximo viernes habrá elección de destinos para 110 nuevos trabajadores en todo el país y ya se aseguró que cuatro compañeros o compañeras serán destinados a San José, lo cual «sin duda va a contribuir a mejorar la situación».

La lucha continúa

Pese a haber conseguido esta solución «paliativa y transitoria», el Consejo se mantuvo activo con el tema y solicitó reuniones con dirigentes políticos del departamento de San José, a quienes les trasladó su preocupación por las consecuencias de la falta de personal: el impacto en la salud laboral de los trabajadores y el debilitamiento en la calidad del servicio brindado a los usuarios.

En semanas anteriores AEBU se reunió con los diputados maragatos Mauricio Viera y Sergio Valverde, del Partido Colorado y el Partido Nacional respetivamente, y el pasado lunes lo hizo con el secretario general de la Intendencia, Leonardo Giménez.

Un aspecto fundamental para el sindicato, con centro en evitar nuevas situaciones, es que el Banco República tome un rol más proactivo y preventivo, para no llegar a estados críticos y atacarlos con antelación.

Joaquín Santa Cruz señaló que, por ejemplo, se podrían adelantar vacantes de trabajadores que están cursando su licencia prejubilatoria, es decir que, aunque formalmente no están jubilados, ya no están asistiendo más a trabajar. Actualmente hay unos 200 compañeros y compañeras en esa situación.

«Este tipo de gestiones, que son pedidos de excepción a la OPP, entendemos que tendría que hacerlas el banco y nos preocupa que no surjan desde ahí directamente», añadió.

Otra medida a tomar es «que el banco establezca las estructuras de personal que tiene que haber por sucursal». Hoy en día la empresa no elabora esa información, por lo que «no se puede detectar la necesidad» hasta que no se desata un problema.