Debate sobre el Puerto: «No es un problema de empresas, es un problema de reglamentación»

Debate sobre el Puerto: «No es un problema de empresas, es un problema de reglamentación»

Este martes se realizó la primera de las tres charlas que el Sindicato Único de Portuarios y Ramas Afines (SUPRA) tiene previstas para discutir el tema Identidad, soberanía y puertos. Esta tuvo lugar en la Sala Camacuá de AEBU y se transmitió vía online para todo el mundo. Aquí se puede volver a ver de forma completa.

El evento fue introducido por Marcelo Briñon y Vanessa Peirano, dirigentes del SUPRA, quienes dieron un marco general a la dicusión, cuyo centro fue el nuevo acuerdo del puerto de Montevideo con una empresa de origen belga y los decretos que lo rigen.

Tras estas intervenciones, hicieron uso de la palabra el Ing. Alberto Díaz y el Ing. Fernando Puntigliano, expresidente de la Administración Nacional de Puertos en los períodos 2010-2020 y 2005-2009 respectivamente.

Díaz hizo una contextualización y explicación del funcionamiento portuario en años anteriores, y criticó el nuevo acuerdo porque «no podemos pensar que un reglamento de atraque va a quedar vigente por decreto para siempre, tiene que poder cambiarse y ser flexible».

También mencionó como un tema importante «la seguridad que se le da a las navieras» y alertó que «la actividad de los que trabajaban en determinadas áreas está en riesgo». Por último, dejó en claro que este «no es un problema contra ninguna empresa, es un problema de reglamentación».

Finalmente, Puntigliano habló sobre el concepto de soberanía, y opinó que «tenemos que manejar un concepto moderno de soberanía, en el marco de la competitividad, de la excelencia, del profesionalismo, de la formación y del compromiso político».

También analizó el futuro del país como hub comercial y puso el foco en la concesión a la empresa Katoen Natie, a la que definió como «un buen operador logístico», pero planteó otras preguntas y temas que, considera, también deberían tenerse en cuenta, como por ejemplo «qué piensan los armadores».