Este lunes AEBU comenzó a intensificar su conflicto con la Asociación de Bancos Privados del Uruguay, por la situación de Caja Bancaria y el estancamiento en las negociaciones para encontrar una salida para su crisis financiera.

Sobre las 16 horas, el sindicato se movilizó sorpresivamente en la sede del banco Heritage, en la calle Rincón entre Ituzaingó y Treinta y Tres, y realizó una asamblea en el hall donde habló el presidente del Consejo del Sector Financiero Privado, Juan Fernández.

Allí, Fernández dijo que «Heritage y sus otros seis bancos socios dentro de la ABPU están negando soluciones jubilatorias para sus trabajadores», y denunció que los bancos privados «mienten mucho y públicamente».

«Mienten cuando dicen que la Prestación Complementaria Patronal encarece el crédito», ya que «la ley 13.396 habla de una tasa y no de un impuesto» y «además sus pares de los bancos oficiales no hacen ese traslado y lo presupuestan en los costos operativos de la institución».

Fernández también recordó que hace un año AEBU alertó de la situación financiera de la Caja Bancaria al Gobierno, pero este no tomó medidas. «El Ejecutivo discriminó a la Caja Bancaria y optó por privilegiar al malla oro», dijo, y dejó en claro que «la ley no defeccionó, sino que no fue aplicada en el momento que se debió».

En su discurso en la asamblea de este lunes, el presidente del Consejo del Sector Financiero Privado señaló que, en otro intento de buscar soluciones para la Caja, «se pidió un adelanto de aportes para que la premura de la liquidez no conspirara contra el éxito de la negociación», pero «el banco Heritage y los otros seis negaron esa ayuda».

Otra de las críticas que hizo Fernández fue que los bancos privados «al momento de poner, plantean reducciones en los beneficios consagrados en nuestros convenios colectivos», es decir que «quieren financiar el aporte que les corresponde con la pérdida de beneficios y condiciones de convenios colectivos que están vigentes». «Estos tipos piden financiar su aporte con la pérdida de los trabajadores. Es inadmisible», concluyó.