Este lunes 1° de mayo se realizó un acto por el Día de las y los Trabajadores en la plaza Mártires de Chicago, que tuvo sus señas particulares a 40 años del histórico acto de 1983, que marcó la recuperación democrática, y a poco de los 50 años de la huelga general que paralizó al país en la ruptura en 1973. Pero además a pocas horas de la aprobación en diputados de la reforma jubilatoria como punto alto del nivel de confrontación con el gobierno de coalición en este período de gobierno, con un paro general y movilización multitudinaria, el pasado martes.
El PIT-CNT no solamente planteó a través de los referentes que estuvieron a cargo de la oratoria la reducción de la jornada laboral y la oposición a la reforma jubilatoria, sino un vasto escenario donde quedó desarrollado el “modelo de la desigualdad”, caracterizado por recortes en políticas públicas destinadas a la mayoría de la población, aumento de tarifas e impuestos, y otras decisiones del oficialismo que perjudican a los trabajadores al tiempo que favorecen a los proclamados por el gobierno como los “malla oro”.
En esta nota compartimos algunos fragmentos de lo que fue la intervención de Martín Pereira, Abigail Puig y Marcelo Abdala, también en estos asuntos. En primer lugar, Pereira, presidente de la Federación de Funcionarios de Salud Pública (FFSP) e integrante del secretariado ejecutivo del PIT-CNT, se refirió al conflicto que atraviesa la comunidad educativa del liceo IAVA con las autoridades de la educación y dijo que el movimiento sindical “va a estar en el IAVA, rodeando a los gurises, porque están defendiendo sus derechos, y gracias a esta lucha hoy hay plata para arreglar el liceo, gracias a la lucha de los estudiantes que no enseñan que a veces hay que ir un poco más y pelearla”.
Pereira dijo que “no se puede mirar de forma aislada” la reforma jubilatoria que aprobó el gobierno sino junto “a la realidad del país y que el gobierno ajustó sobre los trabajadores”. Hay “3000 puestos de trabajo que se han perdido en el Estado y realmente generaron un riesgos”. En su discurso rechazó la ley de personería jurídica y dijo que “algunos se quedaron con las ganas, querían asfixiar al movimiento sindical, para algunos el mejor sindicato es el que no existe”.
Abigail Puig, secretaria de Organización de la Federación Uruguaya de Empleados del Comercio y Servicios (FUECYS), dijo en diálogo con Radio Camacuá que en el marco del tercer año de gobierno de coalición “se llega con grandes banderas”. Consejo de Salarios, presupuesto nacional, “saber si realmente se van a construir políticas de empleo que orienten y que eviten la precarización del trabajo y la informalidad”.
Marcelo Abdala, presidente de la central sindical, se refirió a los números que denuncian que las políticas que se están llevando adelante perjudican a “las mayorías” y exponen “el modelo de la desigualdad”.
“la mano metida en el bolsillo del trabajador y en épocas de revolución tecnológica, con la necesidad de promover empleo juvenil, es un despropósito, un ajuste fiscal encubierto, que busca sustentabilidad económico financiera, sin cambiar la financiación, sino rebajando derechos, aumentando la jornada de trabajo vital de la gente, obligando a trabajar más en el momento que uno está más desgastado, y organizando para varios sectores – como quedó probado y nadie pudo refutar- un deterioro de las jubilaciones; decimos con claridad que por un lado que el movimiento sindical va a dar pelea por una reforma alternativa de la seguridad social que cambie los tantos de la financiación, amplíe derechos que sea sustentable desde el punto de vista económico, ambiental, financiero pero en primer lugar, humanamente sustentable, se buscarán todos los caminos para impugnar este ajuste fiscal encubierto, la reforma jubilatoria”, dijo Marcelo Abdala.
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