Informe económico: un tercio de los uruguayos ocupados gana menos de $25.000

Informe económico: un tercio de los uruguayos ocupados gana menos de $25.000

El instituto Cuesta Duarte publicó recientemente un informe que da cuenta de la situación salarial de los uruguayos en el año 2022, en base a los números de la Encuesta Continua de Hogares del Instituto Nacional de Estadística.

El dato más revelador es que un tercio de los uruguayos ocupados (549.000 personas) percibe menos de $25.000 líquidos por mes, es decir que tienen un salario «sumergido» según la categorización del instituto de investigación del PIT-CNT.

En diálogo con Camacuá Diario, el economista Hugo Bai, del Cuesta Duarte, explicó con más detalle el contexto de estos datos y señaló que, mientras la economía crece, el salario real promedio baja y, lo que es aún más preocupante, baja más en los sectores de menos ingresos.

En este sentido, Bai indicó que, con respecto al año 2019, en el 2022 hubo cien mil uruguayos más que quedaron por debajo de la franja definida como sumergida.

Dentro de este grupo de los llamados «veinticincomilpesistas», predominan las mujeres respecto a los hombres y los habitantes del interior por sobre los de la capital. Además, es una franja con mucha presencia de jóvenes, los más castigados en el acceso al trabajo digno.

Mirá el informe completo acá.

 

Foto: Javier Calvelo/ adhocFotos

Salario real sigue por debajo de los niveles prepandémicos en Uruguay

Salario real sigue por debajo de los niveles prepandémicos en Uruguay

El Instituto Cuesta Duarte publicó esta semana un informe que analiza la evolución del salario real en Uruguay, teniendo en cuenta los datos oficiales del primer trimestre del 2023.

Según el informe, marzo de este año cerró con una suba del salario real del 3%, si se lo compara con el mismo mes del año anterior. Sin embargo, aún sigue por debajo de los niveles prepandémicos: un 2% menos que en el 2019.

La explicación de esta suba, explica el informe, se debe a que los ajustes salariales registrados en el mes de enero, tanto en el sector público (de un 8%) como en el sector privado (en el entorno del 3%), que fueron mayores a los del 2022. Tanto es así que, si se desglosa el trimestre, se ve cómo el salario real crece en enero -por dichos ajustes- pero cae tanto en febrero como en marzo.

El informe también recorre la trayectoria del salario real a lo largo de este período de Gobierno, la cual tuvo un primer momento crítico en la primera mitad del 2020, a causa de la fuerte aceleración de la inflación que ocasionó la pandemia, y luego otro período -hasta julio de 2021- donde se siguió perdiendo salario por los recortes, fundamentalmente, en el sector público.

Entre julio de 2021 y setiembre de 2022, el Índice Medio de Salarios comenzó a crecer, pero la inflación también crecía por encima de las proyecciones, por lo que los uruguayos seguían perdiendo salario real. Recién en el último trimestre del año pasado, el salario logró superar la inflación y empezar un crecimiento que, pese al descenso en febrero y marzo del 2023, terminó con saldo positivo en el primer trimestre de este año.

Proyectando lo que resta del 2023, el Instituto Cuesta Duarte afirma que el comportamiento del salario dependerá de una serie de variables fundamentales, como la inflación y el IMS, «que este año depende en buena medida de las definiciones que se adopten en la décima ronda de negociación colectiva en el sector privado».

Esa ronda de los Consejos de Salarios, que será clave, «se trata de unas 170 unidades de negociación, que van a negociar sus ajustes salariales para los próximos años, entre marzo y setiembre de este año, la mayoría en el mes de julio», informa el instituto del PIT-CNT.

 

Foto: Javier Calvelo / adhocFOTOS

Salario real bajó 3% en los últimos dos años

Salario real bajó 3% en los últimos dos años

El Instituto Nacional de Estadística (INE) divulgó los datos del mercado laboral a cierre de 2021, con esto se confirma que el poder adquisitivo de los trabajadores continúa deteriorándose por segundo año consecutivo.

La inflación cerró el año en 7,96%, mientras el IMS (Índice Medio de Salarios) acumuló un aumento a diciembre de 6,26%, lo que significa que el salario real (el poder de compra de los trabajadores) registró una ciada de 1,56%.

Esto se suma a la caída del año 2020, en la que el salario real cayó 1,52%. Tras dos años, el salario real sufrió una caída de 3,06%

Sector privado y público

El salario de los empleados públicos tuvo una mayor caída que los asalariados del sector privado. En el sector privado registró una caída de 1,35% y en el público de 1,92%. En 2020, había sido mayor la caída salarial de los trabajadores privados: 2,25% respecto a 0,22% de los públicos.

Dentro del sector privado el único sector que mantuvo su poder de compra, aumentando el salario en igual porcentaje que la inflación fue el de intermediación financiera, todos los demás ajustaron por debajo del aumento de los precios.

Jubilados también perjudicados

Tras conocerse el IMS de 6,26%, se confirmó que los jubilados sufrirán una caída del poder de compra. Las pasividades aumentarán 1,8% menos de lo que lo hizo la inflación. Lo mismo había ocurrido en 2020 cuando el ajuste había sido de 5,58%, mientras que el aumento de precios del año fue de 9,41%.

Consejos de Salarios: cuál es la situación de los subgrupos del sistema financiero

Consejos de Salarios: cuál es la situación de los subgrupos del sistema financiero

Aníbal Peluffo

por Camacuá y Reconquista

El economista Aníbal Peluffo, integrante de la Comisión Técnica Asesora de AEBU, evaluó los nuevos lineamientos salariales del Poder Ejecutivo y explicó en qué situación se encuentran los sectores que representa AEBU.

En diálogo con Camacuá y Reconquista, Peluffo recordó que «venimos de un año en el que no hubo negociación», que tuvo como consecuencia «una caída de 4,2% del salario real».

De acuerdo a las pautas que recientemente dio a conocer el gobierno, esta caída no se recuperará en los próximos dos años (plazo estipulado para los convenios) y en el mejor de los casos, que es el de los trabajadores de empresas grandes poco afectadas por la pandemia, apenas se recuperará un 1,6%.

Según explicó Peluffo, los trabajadores de los sectores poco afectados pero de empresas pequeñas (menos de 5 empleados) recuperarán solo un 1% del salario real perdido; y los que trabajan en sectores catalogados como muy afectados por la crisis del COVID-19 volverán a tener un año puente, es decir no recuperarán nada.

El correctivo al final del período, en los casos en los que está previsto, está sujeto a la evolución del empleo, algo que también es considerado negativo porque «se condiciona el salario a otra variable que no tiene nada que ver con el desempeño de los trabajadores o la productividad y rentabilidad que generen».

En cuanto a la situación particular del sistema financiero, Peluffo detalló que, de todos los subgrupos de actividad que AEBU representa, hay cuatro que no negociarán en esta ronda porque tienen convenios vigentes: los bancos, administradoras de crédito, tarjetas de crédito y procesadoras de tarjetas.

Pero hay 11 subgrupos que sí tendrán sentarse a negociar bajo estas nuevas pautas que propuso el Poder Ejecutivo. Nueve de ellos vienen de pasar el año puente de la ronda anterior: AFAP, casas de cambio, servicios financieros, aseguradoras, agencias de quinielas, fideicomisos, cooperativas de intermediación financiera, centrales de redes de pago y residual (subgrupo que reúne a varios rubros pequeños).

Los dos restantes, que son transportadoras de valores y cooperativas de ahorro y crédito, tienen que negociar ahora en los Consejos de Salarios, pero no vienen del período puente porque se lo «saltearon» por tener convenios vigentes.

Peluffo destacó que ningún sector del sistema financiero está catalogado como muy afectado por la pandemia, y que en general dentro del un sistema con mucha diversidad los números son buenos.

Quebramos la pauta salarial

Quebramos la pauta salarial

Cuando a mediados de julio de 2019 el actual director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Isaac Alfie, proponía “mantener constantes” salarios y pasividades por dos o tres años, como forma de equilibrar el déficit fiscal, la mayoría de la población prefirió confiar en otros anuncios de campaña, que prometían que no habría pérdida de salarios.

Alfie apuntaba directamente a utilizar los salarios y jubilaciones como la “única forma de disminuir el rojo de las cuentas públicas sin aumentar impuestos”. Dejaba así claramente establecido que el programa de la coalición de Gobierno descargaría sobre los ingresos de la población el costo de reducir el déficit fiscal.

En aplicación de dicha orientación, con la pandemia como telón de fondo y la pérdida de empleo del sector privado haciendo presión sobre los trabajadores, se construyeron las pautas salariales. Pautas que se aplicarían en coincidencia con las patronales para producir una rebaja salarial generalizada. Esta decisión política implica que al 30 de junio de 2021 se producirá una reducción salarial equivalente a la caída del PBI. Dicho de otra forma: se descargará sobre los ingresos de los trabajadores la totalidad de la caída de la actividad económica.

Editorial Secretaría de Prensa y Propaganda de AEBU - Quebramos la pauta salarial